Los desastres naturales son una realidad inevitable. La erupción de un volcán (como ha ocurrido en España en La Palma), inundaciones provocadas por lluvias torrenciales o terremotos, son algunos de los ejemplos más sonados de esta última década. Lo que está claro es que todos estos fenómenos dejan patente que tenemos una asignatura pendiente con la gestión de riesgos. Por esta razón, la International Organization for Standardization (ISO) ha creado la norma ISO 22329, para ayudar en la gestión de emergencias a través de las redes sociales.
Tabla de contenidos
Cómo utilizar las redes sociales en situaciones de emergencia según la ISO 22329
A veces, el entorno de las redes sociales es un tanto complejo de gestionar: Sin embargo, existen herramientas nativas creadas por las propias plataformas, cuyo propósito no es otro que el de ayudar a localizar a tus amigos, familia y seres queridos lo más pronto posible para saber que están bien. Ejemplo de ello es el Safety Check de Facebook.
Y es que, como bien indica la norma ISO 22329, se ha comprobado que un alto porcentaje de personas acuden a las redes sociales como primer canal para comunicar que no les ha pasado nada. Para bien o para mal, esa viralidad que caracteriza al mundo social media juega un papel esencial cuando hablamos de emergencias. Y son los profesionales especializados en la gestión de riesgos los que deben saber cómo utilizar las redes sociales cuando ocurre este tipo de catástrofes.
Estructuras organizativas eficaces según la ISO 22329
Tal y como indica la norma ISO 22329, para poder actuar de manera eficiente, a tiempo y siempre bajo el prisma de la coordinación entre personas, es fundamental que las organizaciones cuenten con estructuras que aporten valor, inmediatez y soluciones realmente efectivas independientemente del grado de gravedad de la situación.
Y para ello es necesario tener en mente tres etapas clave que marcan la diferencia entre llegar en tiempo y forma o llegar tarde:
- Evaluar y categorizar el nivel de riesgo previo a que suceda el desastre natural o emergencia. Todo el tiempo invertido en trabajar y crear un protocolo de actuación es tiempo ganado.
- Coordinar y cooperar. Aunque sea inevitable, siempre tenemos recursos a nuestra disposición para mitigar los efectos de dicho escenario y, lo más importante, nos permite actuar rápido.
- Recuperar la normalidad en el menor lapso de tiempo posible. Disponer de mecanismos propios que nos ayuden a ir mitigando los efectos negativos de esta emergencia.
Los planes de actuación son indispensables, el riesgo cero no existe y hay que estar preparados.
Esta nuevo estándar internacional forma parte de la familia de la ISO 22320, que se utiliza para la implantación de Sistemas de Gestión de Emergencias y Desastres Naturales.
La norma puede descargarse desde la propia web de ISO, aunque no es de descarga gratuita.
Máster en Gestión de Riesgos especializado en Emergencias
Ahora que ya sabes un poco más sobre la norma ISO 22329, te contamos que puedes ampliar tu formación en este campo con nuestro Máster en Gestión de Riesgos especializado en Emergencias y Desastres Naturales. Saber preparar a una organización frente a situaciones extremas es una tarea compleja. Con esta formación serás capaz de definir protocolos de actuación, implantar esta norma en la empresa, evaluar el riesgo de los fenómenos naturales y desarrollar planes de prevención.
Puedes solicitar más información sobre el Máster en Risk Management y Emergencias haciendo clic en el siguiente botón:
Si quieres seguir ampliando información sobre esta temática te invitamos a visionar el siguiente vídeo sobre la gestión de emergencias:
0 comentarios